¿Por qué dan calambres en las piernas? Descubre cómo prevenirlos


Seguramente en mitad de la noche o después de salir a correr, has tenido que levantarte a causa de un dolor bastante intenso en algún músculo. Estás sufriendo las consecuencias de un calambre muscular. Pero, ¿te has preguntado alguna vez por qué dan calambres en las piernas y en otros músculos? ¿Qué le está pasando a tu cuerpo exactamente? Hoy en Escuela Masternatura vamos a intentar resolver estas cuestiones.

¿Qué son los calambres musculares?

Un calambre muscular es una contracción repentina e involuntaria de uno o varios músculos. Por lo general suelen ser inofensivos, pero puede darse el caso de que imposibiliten el uso del músculo afectado. Pueden ser más o menos dolorosos y tener una duración de unos segundos o varios minutos. Aunque los más comunes son los calambres en las piernas, existen otros músculos que también son frecuentes:

  • Muslos
  • Pies
  • Manos
  • Brazos
  • Abdomen
  • Caja torácica

¿Qué hacer si nos da un calambre?

Generalmente, los calambres musculares son inofensivos y no es necesario recibir un tratamiento específico. Pero sí que existen algunas recomendaciones para aliviarlo y reducir su dolor:

  • Estirar el músculo afectado y masajear suavemente
  • Aplicar calor cuando el músculo se tense, y frío cuando duela
  • Beber líquidos

¿Por qué dan calambres en las piernas?

Aunque en muchas ocasiones, sus causas suelen ser desconocidas, estas son algunas de las principales que causan los dolorosos calambres en las piernas al igual que en otros músculos:

  • Uso excesivo de un músculo
  • Deshidratación
  • Tensión muscular
  • Niveles bajos de electrolitos como potasio, calcio o magnesio
  • Embarazo
  • Compresión de los nervios
  • Someterse a diálisis
  • Mantener una misma postura por un período prolongado
  • Ciertos medicamentos
  • Temperaturas extremas

Aunque como hemos visto, los calambres musculares suelen ser inofensivos, pueden camuflar otras enfermedades no diagnosticadas como:

  • Suministro inadecuado de sangre: el estrechamiento de las arterias puede provocar un dolor similar al de los calambres en las piernas y en los pies al hacer ejercicio.
  • Comprensión de nervios: la compresión de los nervios de la espina dorsal puede producir dolores similares a los calambres en las piernas, empeorando el dolor cuanto más camines.
  • Cantidad insuficiente de minerales: una de las consecuencias más comunes en personas con insuficiencia de potasio, calcio o magnesio es sufrir calambres. También si se está tomando medicamentos diuréticos se puede ver una disminución de estos minerales.

Cómo prevenir los calambres musculares

  • Evita la deshidratación: una de las principales acciones que puedes hacer para prevenir los calambres musculares es beber abundante líquido todos los días y con frecuencia. También beber antes, durante y después de los entrenamientos para restablecer los líquidos con intervalos regulares. Los líquidos ayudan a que los músculos se contraigan y se relajen adecuadamente, ya que mantienen las células musculares hidratadas y con menor irritación.
  • Estira tus músculos antes y después de entrenar: para evitar calambres es vital realizar estiramientos antes y después de hacer deporte. En el caso de que suelas tener calambres por la noche, puedes probar antes de dormirte a estirar o realizar algún tipo de ejercicio ligero por unos minutos como la bicicleta fija.
  • Lleva un alimentación sana y equilibrada: junto a la hidratación son esenciales para el bienestar de cualquier persona. Esto unido a otros hábitos saludables como no fumar, no beber alcohol y no consumir cafeína ayudarán a reducir los calambres.
  • Descansa adecuadamente: un correcto reposo ayudará a que el cuerpo se recupere tras el esfuerzo realizado, siendo lo recomendado entre siete y nueve horas de descanso.
  • Consulta a tu fisioterapeuta: en el caso de que se den calambres con demasiada frecuencia, que nos perturban el sueño o que resultan ser muy doloroso en incómodos, puedes consultar con tu médico o fisioterapeuta para buscar conjuntamente una solución.