El masaje y quiromasaje pueden parecer lo mismo a ojos de mucha gente, pero no lo son. Cada uno se caracteriza por unas técnicas determinadas y por proporcionar unos determinados beneficios. A continuación, te mostraremos en profundidad cuáles son.
El masaje consiste en amasar, friccionar, presionar la piel, músculos, tendones y ligamentos. Se puede hacer con las manos, con algún utensilio, o aparato. Por otra parte, el quiromasaje es un masaje que se realiza únicamente con las manos. Es decir, no se utiliza ningún tipo de utensilio ni aparatología. Es una gama de manipulaciones variadas y técnicas de presión sobre puntos practicados sobre la superficie corporal con fines terapéuticos. Puede realizarse con diferente ritmo e intensidad.
Beneficios que proporcionan ambas técnicas
El objetivo del masaje es relajar o activar la musculatura dependiendo del fin que se pretenda, entre otras cosas:
- Ayuda a reducir el estrés.
- Ayuda a que los músculos mantengan su flexibilidad.
- Alivia problemas tales como sinusitis, artritis, alergias, dolores de cabeza, lesiones deportivas, etc.
- Elimina toxinas, activa la circulación sanguínea y linfática.
- Oxigena los tejidos, hace que produzcamos endorfinas, por lo que alivian el dolor y producen sensación de bienestar.
- Mejora la circulación de la sangre y el flujo de la linfa, lo que ayuda a aumentar la capacidad de la sangre para transportar oxígeno y a eliminar sustancias tóxicas e impurezas.
Por su parte, y dado que es una técnica también totalmente natural en la que no interviene ninguna clase de aparato ni está acompañada de medicación alguna, el quiromasaje está altamente recomendado para:
- Combatir el lumbago, contracturas dorsales, dolores de hombro, cervicales, etc.
- Ayudar a reducir y a controlar la celulitis.
- Suprimir el dolor muscular, tendinitis y aliviar problemas de circulación. Por esta razón es muy recomendable para tratar la ciática o la lumbalgia, esguinces, tortícolis, contracturas, tendinitis o el síndrome de túnel carpiano, entre otras dolencias.
No se debe olvidar que el quiromasaje es una técnica especialmente indicada para aquellas personas que padezcan dolores de origen muscular, tendinoso o cuyo origen radique en los tendones. La presión de determinados puntos se traduce en efectos sedantes sobre el sistema nervioso y en la liberación de sustancias analgésicas endógenas o propias.
Tipos de masajes
Podemos encontrar una infinidad de masajes que se aplican a través de ambas técnicas. Entre ellas encontramos:
- Masaje relajante: cuya finalidad es relajar. No se trabajan las contracturas, tiene un efecto neurosedante, alivia tensiones físicas, emocionales y el agotamiento.
- Masaje descontracturante: en el que se trabajan los músculos para eliminar esas contracturas que se han ido produciendo. En este masaje la presión e intensidad es mayor, pudiendo ser en ocasiones un poco doloroso, por las propias contracturas.
- Masaje craneofacial: en el que se trabaja en cara y cráneo con movimientos principalmente circulares ascendentes. Resulta muy relajante y terapéutico, indicado para migrañas, dolores de cabeza, mandíbula y cuello.
- Masaje circulatorio: como su propio nombre indica, favorece la circulación de retorno, por lo que ayuda a las personas con circulación deficiente y con varices a notar más ligereza y eliminar edema.
- Masaje de drenaje linfático: es un masaje suave que favorece la eliminación del organismo de las toxinas y sustancias de deshecho.
- Masaje deportivo: su propósito es preparar a los músculos antes de la competición, oxigenando y aportando flexibilidad.
Los masajes es algo que nos ayuda a estar mejor con nuestra mente y cuerpo, haciéndonos más felices. Por esta razón, se recomienda vivir esta experiencia solicitando uno de un profesional al menos una vez en la vida.
Contraindicaciones del masaje y quiromasaje
Como su nombre indica, se refieren a aquellos casos en los que, de una forma parcial o total, no conviene efectuar masaje. Vamos a proceder a mencionar las contraindicaciones más importantes:
- Durante los tres primeros meses del embarazo (después, con prescripción médica).
- Enfermedades infecciosas de la piel (p.e.: hongos, lupus o LES) y otras no infecciosas generalizadas (p.e.: dermatitis alérgica). Úlceras por decúbito y quemaduras.
- Enfermedades vasculares inflamatorias (p.e.: flebitis), inflamaciones de los ganglios linfáticos y cadenas ganglionares. Debilidad vascular y retenciones circulatorias graves.
- Trombosis y embolia arterial, por riesgo de embolismo pulmonar o de otros tejidos del organismo, venas varicosas avanzadas y en cardiopatías en general (p.e.: taquicardias, hipertensión arterial).
- Hematomas recientes, hemorragias, heridas sin cicatrizar, esguinces agudos, contusiones de importancia, edemas agudos, derrames articulares.
- Fibrosis y enfermedades musculares degenerativas.
- Enfermedades reumáticas agudas.
- Problemas renales en fase aguda. Cálculos de riñón, vesícula en fase de expulsión.
- Rotura o desgarros de músculos, vainas, tendones, ligamentos.
- Enfermedades del Sistema nervioso: Lesiones de las vías piramidales. Pacientes con cuadros de compresión nerviosa.
Cabe decir que, por regla general, si el dolor no se alivia con el masaje, sino que aumenta o empeora, se debe pensar que habrá alguna causa que nos indica que está contraindicado, y por ello se deberá sospechar que: hay algún problema nuevo o, que el diagnóstico y, por consiguiente, el tratamiento no son los adecuados. En cualquier caso, debemos remitir el paciente a su médico, para una nueva valoración.
Desde Escuela MasterNatura te aseguramos que, estas técnicas serán aplicadas de manera adecuada por nuestros profesionales, ofreciéndote así un excelente estado de bienestar general según tus necesidades. Pregúntanos por cualquier duda o fórmate con los cursos que impartimos.